FIDELIDAD PERSONAL


Que cierto eso de que la verdad nos hace libre. Cuando miro a mi alrededor pienso, cuántas de éstas personas serán realmente libre? 

Mientras viajo a Santiago, observo a un matrimonio de edad, que viaja sentado en la hilera anterior a la mía, pienso: Dios tendrá planificado o pensado para mí en esta vida disfrutar y vivir el amor en su máximo esplendor? A veces me da temor verme tan sola como me veo, desde el punto de vista de pareja, quiero poder compartir con alguien mis días, buenos y no tan buenos, los momentos de éxito y fracaso, la felicidad y la tristeza y, todo ello, mientras pasan los años y lleguemos junto muy juntos hasta muy muy viejitos. 

Este es un deseo que tengo hace mucho rato el cual vuelve a mi luego de ver a este matrimonio.  Este último tiempo que he estado viviendo sola me he dado cuenta que es exquisito tener tiempo para uno, es bueno tener un espacio propio, pero mientras más avanza el tiempo es peor, debido a que nos vamos acostumbrando, nos ponemos mañosos y poco tolerantes ante posibles amenazas de nuestra privacidad.

Al costado izquierdo mío, está la otra cara, dos mujeres, dos señoras de edad, al parecer solteras quienes comparten el tiempo y las enfermedades con las amigas. Claro no está,  que no es malo, ni tampoco digo que no sea válido, pero definitivamente poder disfrutar de ésta vida con un partner, con un compañero, con el amigo y amante, con el hombre que nos protege, que nos cuida y nos mima, es el descueve y, por qué no reconocerlo, quiero vivir eso, quiero atreverme esta vez a decir sí. Ese sí irracional, ese sí no pensado sino sentido, ese sí, que no tiene por delante titulo, situación socioeconómica ni cultural. Quizás complemento son los amigos, pero lo primero sea esa persona con la que decides compartir cada minuto de tu vida. 

Me asusta sentir que pasan el tiempo, siento que cada año pasa más rápido. Merezco vivir el amor nuevamente, merezco sentirme y saberme amada, así como también yo amar y respetar al hombre que Dios haya elegido para mí, para que seamos felices, conformemos un hogar, una familia. 

Me asusta? Sí, me asusta también ver cómo amigas y amigos dan ese sí irracional y después que lo dan la magia inicial se va… es como que la espantaran y se esfumara de un día a otro y, sin darnos cuenta, comenzamos a verlos de manera individual en affter, en happy hour por separados argumentando que es bueno el espacio, que es bueno un respiro, no déjala en la casa no más… etc. Creo que cada una de las fundamentaciones es buena y válida, pero cuándo los comienzas a ver con su amante, te preguntas: ese era el espacio? Ese era el respiro? Cuándo preguntas la respuesta es: sí, la cague, pero yo la o lo amo.

Es vedad que errar es humano, es verdad que nada dura para siempre… pero lo que sí sé es que las decisiones son de cada uno y que bueno o malo debemos hacernos cargo de los compromisos que asumimos. Al asumir que quiero estar sola es mi responsabilidad y debo aprender a vivir con ella, pero mayor responsabilidad es asumir que quieres compartir con otra persona, por ende, al asumir ese compromiso también debes ser responsable para enfrentar algún quiebre o sencillamente el hecho de dejar de amar o querer…

Luego de esto y de otras experiencias, creo que cada forma de llevar la vida, la forma de amar ya sea dentro de un mismo espacio, bajo alguna etiqueta o de manera libre, es decisión de cada cual, pero sea cual sea, debemos hacernos cargo….

Sigo viviendo sola, tengo momentos que comparto con quien deseo y quiero en este momento, pero mis momentos los comparto de manera libre y feliz, con entereza y sencillez, de forma plena e integra, firmando el mayor y más solemne de los compromisos, que es el amar y amarme a mí misma, ser fiel a mis principios y a lo que deseo hoy en día, así como las amigas del bus o la pareja de viejitos.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Condenada a Muerte

INICIANDO LA RECONSTRUCCIÓN

Ser agradecido